Por: Julian Lacacta / http://lacacta.wordpress.com
El Perú es un país con una economía neoliberal, es
decir es un país capitalista dependiente de los Estados Unidos de América y de
la Unión Europea. Se profundiza el neoliberalismo en el Perú en la década de
los noventa con la dictadura fujimorista, posterior a eso solo se ha cambiado
de personas, el gobierno de Valentín Demetrio Paniagua, Alejandro Celestino
Toledo Manrique, Alan García, Ollanta Moisés Humala Tasso, Pedro Pablo
Kuczynski y Martín Alberto Vizcarra Cornejo, son gobiernos que han seguido el modelo
neoliberal, pero también han puesto en evidencia el fracaso del capitalismo en
el Perú. La corrupción está en todas las esferas de sociedad capitalista, los
neoliberalistas luchan por la institucionalidad de la corrupción, lo vemos con
los empresarios, políticos de derecha y ahora se ha desenmascarado lo del poder
judicial infiltrado por jueces neoliberales corruptos.
El capitalismo en el Perú se profundiza en la
década del noventa y se caracteriza por crear monopolios más grandes reduciendo
el aparato del Estado a su mínima expresión, con el fin de explotar a los
trabajadores con mano de obra barata. La economía capitalista en esa década se
caracterizó por transformar las empresas estatales en empresas capitalistas
privadas para el control de la vida económica del país. El tipo de capitalismo
que aún persiste en nuestro país es un capitalismo neoliberal de libre mercado
con nula participación del estado, a tres décadas de haber sido implementado,
trae un mal que afecta a nuestra sociedad y es la corrupción institucionalizada
en la política y en los diferentes aparatos del estado.
Los políticos neoliberales no convencen con
argumento o propuestas sino convencen con negociados, el 21 de diciembre del
2017, luego de que el pleno del Congreso desestimó el pedido de vacancia contra
Pedro Pablo Kuczynski, con la votación: 79 a favor de la vacancia presidencial,
19 en contra y 21 abstenciones, para aprobar la vacancia presidencial se
requería de los 2/3 del número legal de congresistas, equivalente a 87 votos de
los 130 congresistas. El 24 de diciembre
de 2017 se da el indulto a Alberto Fujimori, llamado «indulto y derecho de
gracia por razones humanitarias» que fue concedido por el presidente en ese
momento, Pedro Pablo Kuczynski, una clara muestra que se hizo en negociado
entre PPK y Kenji Fujimori a cambio que el legislador le apoyara políticamente
en el congreso, eso se evidencio en la votación de los llamados “avengers”. La
otra muestra que existe de los negociados en la clase política neoliberal es la
divulgación de audios y videos donde se evidencia los intentos de compra de
votos dentro del congreso para evitar la destitución del expresidente, esto
trajo como consecuencia la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski. El actual
presidente Martín Vizcarra cuando era Ministro de Transporte de la misma manera
evidencio supuesto negociado con la empresa concesionaria de la construcción
del aeropuerto de Chinchero, en Cusco con el consorcio Kuntur Wasi, el
Ministerio Público en ese entonces solicito investigar al ministro de
Transportes, Martín Vizcarra, por el delito de colusión.
En el mes de julio del 2018 se difunde
públicamente por periodistas independientes audios que comprometen a jueces en
actos que a clara luz son corrupción, al mismo estilo de los políticos los
juristas se muestran tal como les hizo el modelo capitalista, se escucha en los
audios negociados, favores individuales. En las grabaciones se notan actos de
corrupción y presunto tráfico de influencias, entre los implicados figuran el
presidente de la Corte Superior del Callao, Walter Ríos y César Hinostroza,
juez supremo y otros juristas defensores del sistema corrupto neoliberal del
Perú. El Consejo Nacional de la
Magistratura (CNM) es la institución encargada de nombrar, ratificar y
destituir a jueces, fiscales y a quienes encabezan el Jurado Nacional de
Elecciones y la Oficina Nacional de Procesos Electorales. En el CNM se decide
el destino de prácticamente todos los engranajes que integran el sistema de
justicia neoliberal de Perú.
El neoliberalismo en el Perú ha fracasado, esta
capa que blinda a ese conjunto de la casta privilegiada y a su farsa que sale a
la luz por el individualismo que profesa y este sistema solo beneficia a un
grupo privilegiado de poderosos que controlan el poder ejecutivo, legislativo y
el poder judicial, para favorecerlos a espaldas de la pobreza del campo
popular, de los trabajadores, obreros campesinos, estudiantes, etc. El
neoliberalismo tiene como objetivo acaparar el Estado con sus “cuadros técnicos”
que se venden como “independientes” para asegurar la vigencia de un modelo
económico fracasado que atenta contra el desarrollo económico del pueblo.
El fracaso del capitalismo en el Perú, también
afecta a la clase política dominante, es por eso que se muestra una crisis de
cuadros políticos, esto por la falta de una formación adecuada en los
militantes sean estas en política, filosofía, económica y gestión pública, más
aún les falta a estos “políticos” la práctica de valores que no las tienen, el
sistema los formo individualistas y luchadores por la institucionalización de
la corrupción en el Perú. Ya no existen partidos políticos de derecha en el
Perú solo hay organizaciones o bandas delictivas de la derecha. Y no se escapan
de eso algunos partidos de izquierda tradicional.
La justicia peruana solo es para los que tienen
recursos económicos, o es justa para ellos, para los que tienen más economía y
para los amigos de jueces, políticos, empresarios, para ellos si es justa en el
sentido que pueden comprar las sentencias a favor de ellos. Los que no tienen
nada de recursos económicos no es justa, tienen que esperas varios años para
sus sentencias, no les dan indultos ni por humanidad, se mueren en las
cárceles, hay inocentes en las cárceles por el simple hecho de no ser amigos de
los jueces o de la casta política corrupta, no se les hace justicia, a ese
nivel ha llegado la justicia en el Perú neoliberal.
Finamente
la solución a los diversos problemas, es la lucha por la creación de
nueva sociedad para tener “hombres nuevos” capaces de servir al pueblo con todo
su corazón, es decir crear una nueva sociedad sin calco ni copia sino creación
heroica de los pueblos como lo pregono nuestro amauta José Carlos Mariátegui,
para lograr ese objetivo cada mejor hijo del pueblo tendrá ser el programa mínimo,
en la práctica mostrarse como es; el hombre nuevo en la vida personal,
académica y social, ser diferente a los corruptos neoliberales, con una sólida
formación política para servir y no servirse de la patria.
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